Casi mil personas de Cajamarca llegaron el domingo 5 a la ciudad de Chimbote tras cuatro días de caminata como parte de su marcha nacional por la defensa del agua y la vida. Este acto de protesta tiene por finalidad la defensa del agua y la tierra; la prohibición del uso de cianuro y mercurio en la minería; y también exigir el cese de actividades mineras en las cabeceras de cuencas hídricas.
Cerca del mediodía, los ciudadanos aparecieron en el distrito de Santa, donde se apostaron por varios minutos en la carretera Panamericana Norte, tras detenerse en el puente que lleva el mismo nombre de la ciudad, para realizar una ceremonia andina de homenaje al agua. Tiraron un arreglo florar del río, pidiendo bendición y protección para que continúen con su movilización.
Tras este acto prosiguieron su recorrido pero acompañados de diversas ancashinos que se sumaron a la movilización que se inició en Cajamarca el primero de este mes y terminará el próximo 10 de febrero en Lima.
La directora de la ONG Natura, María Forondo Farro, y el presidente de la Federación de Organizaciones Agrarias de la Provincia del Santa (Foaprs), Hugo Horna Arias, estuvieron participando de la movilización.
El padre Marco Arana Zegarra, coordinador nacional de la marcha en defensa del agua y la vida, se mostró agradecido por el apoyo recibido por el pueblo ancashino tras su llegada y también por la atención prestada por los medios de comunicación.
“Es una alegría que Áncash siente nuestros reclamos y salió a recibirnos. Lamentamos que el Estado no tenga una política hídrica que respete el derecho al agua y que pena que sean los pueblos, quienes exijan este derecho antes que el propio gobierno”, refirió
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